Sin prisa, pero sin pausa
Un día me tope con la frase “Sin prisa, pero sin pausa” y lo entendí, el hecho de que mis productos no se movieran no significaba que debería tirar la toalla
Tenía años pensando en emprender, este año por fin decidí lanzarme con todo y probar mi suerte.
En estos primeros meses con mi negocio he pasado por muchas cosas, 6 meses parece poco, pero se aprende muchísimo, por ello quiero compartir contigo 3 consejos en mi medio año como emprendedora.
- Sin prisa, pero sin pausa
Los primeros 3 meses emprendiendo los arranque super bien, llegué a vender poco más de $10,000 pesos, pero de repente todo pareció detenerse.
Dejé de tener pedidos y empecé a desesperarme y tener pensamientos negativos como: mi negocio no está funcionando, ya nadie me va a comprar.
Esto me llevó a un lugar de pereza e inactividad, yo sabía que para vender necesitaba subir fotos de nuevos productos/diseños, pero me daba coraje “desperdiciar” mi tiempo en cosas que no iba a vender, así que por casi 2 semanas dejé de crear.
Un día me tope con la frase “Sin prisa, pero sin pausa” y lo entendí, tenía razón, el hecho de que mis productos no se movieran en algunas semanas no significaba que debería tirar la toalla, sino que necesitaba volver y tomarlo con calma, seguir creando y subiendo contenido a redes sociales, sin las prisas de querer venderlo todo pero sin pausar por completo mi negocio.
- Busca comunidad y pide ayuda
Una amiga me invitó a formar parte de un grupo en facebook de personas que tienen la misma máquina que yo utilizo para crear mis productos. Por meses no participé, tenía la creencia de que las personas que hacen lo mismo se ven como competencia entre ellas y jamás compartirán tips con alguien más, así que solo leía lo que escribían. Poco a poco empecé a identificarme con muchos de los posts en el grupo, leía todas las respuestas, todos los consejos que compartían. Me di cuenta que esa comunidad estaba llena de mujeres emprendedoras dispuestas a apoyar y alentar a otras a continuar y no darse por vencidas.
La primera vez que publiqué, lo hice con algo de miedo, seguí el ejemplo de otros post, subí fotos de mis productos y pregunte que me recomendaban hacer con todo el stock que tenía, el cual había hecho para poder subir contenido. Me sorprendió muchísimo todo el apoyo, cariño y elogios a mi trabajo que recibí. Además de llevarme muchos consejos, me sentí comprendida y alentada a seguir adelante.
Saber que existen personas que están pasando o han pasado por los mismos problemas a los que te enfrentas es de gran ayuda, sobre todo cuando te acercas a estas personas y te ofrecen su apoyo y sus consejos, te dan los tips que les han servido y también los que no, para que puedas aprender de sus errores y seguir creciendo.
- El stock: no regales tu trabajo, material y dedicación
A meses de emprender comencé a tener cada vez más y más productos terminados llenándose de polvo, comencé a desesperarme y pensé en ponerlos a precios super bajos o simplemente regalarlos. Cómo no sabía qué hacer creé un post en la comunidad de facebook y encontré muy buenos consejos.
Primero que nada recomendaron repetidamente que no bajara los precios, desvalorizar nuestro trabajo no ayudaría a nadie en la comunidad, nuestro trabajo tiene un valor y es algo que no cualquiera puede hacer, por lo tanto no debemos regalarlo.
Otro consejo que me dieron fue crear una carpeta o un post con todos los productos que tengo en stock y anunciarlos como “entrega inmediata”, también poder usarlos para regalos para amigos y familiares.
Emprender no es un camino fácil, pero si es uno lleno de aprendizajes y satisfacciones, si estás creando tu negocio alrededor de algo que realmente disfrutas hacer vas a poder lidiar con cada problema o eventualidad con la que te encuentres.
Lo importante es siempre seguir adelante, sin prisa pero sin pausa.
Más sobre mi emprendimiento:
Tengo un negocio de personalización, comencé con vasos con diseños de series y películas, poco a poco estoy incorporando más productos cómo elefantes de peluche con los datos de bebés recién nacidos en las orejas, sobres y tote bags, entre otros.